La visita a un hospital por una supuesta gripe le dio un giro inesperado a la vida de una maestra que no sabía su diagnóstico real.
Una maestra vivió una situación extraordinaria cuando visitó el hospital para tratarse una supuesta gripe. Sin embargo, al recibir un diagnóstico completamente diferente terminó perdiendo todas sus extremidades para salvar su vida.
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Para muchos enfermarse es una pesadilla por los tratamientos, los medicamentos y sobre todo las visitas a los hospitales. Sin embrago, para poder llegar a una recuperación oportuna siempre es necesario hacer toto este recorrido y enfrentarse a inyecciones y medicamentos de todo tipo.
No obstante, las cosas se complican cuando no se tiene un diagnostico de lo que en verdad se padece; esto debido a los diferentes síntomas que pueden llevar a decir que se tiene una enfermedad determinada, aunque pueda ser otra; complicado de esta manera toda la situación.
Esto le ocurrió a una maestra quien esperaba recibir un tratamiento por una supuesta gripe; sin embargo, tras algunas revisiones con los médicos terminó saliendo del hospital sin ninguna de sus extremidades.
Maestra pierde sus piernas y brazos tras supuesta gripe
La historia inicia cuando una maestra de secundaria de Texas, Estados Unidos compartió en redes la terrible situación que tuvo que pasar. De acuerdo con su relato, esta acudió al hospital para tratar un resfriado que suponía estaba enfrentando.
Según la mujer los síntomas comenzaron cuando regresó de un viaje de estudios en abril de 2023. Al acudir al hospital, inicialmente le diagnosticaron una neumonía doble; la cual fue provocada por una infección estretocócida. Sin embrago, esta evolucionó hasta convertirse en un choque séptico.
Cuando comenzó la pesadilla, la maestra está tomando un medicamento para la artritis, cosa que agravó la situación. Lo anterior debido a que el medicamento evitó que el organismo ocupara toda su capacidad para combatir la infección presente.
Con todo esto sucediendo, los médicos la pusieron en coma inducido para tratar de salvar su vida. Aunque esto también significó que tuvieran que amputarle sus extremidades con el propósito de conservar saludables todos sus órganos vitales:
“Estaba muy sana, muy en forma. Comía bien y hacía ejercicio”, dijo.
A pesar del trágico momento al que tuvo que enfrentarse, la maestra decidió esforzarse para salir adelante con su nueva condición. Hoy en día, la mujer usa silla de ruedas y su esposo se dedica a cuidarla de tiempo completo; siendo que ha expresado sentirse frustrada por no ser independiente.
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Con información de TeleDiario, Milenio y Uno TV
Portada: Especial
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