La historia de Pablo Acuña, un hombre sin extremidades que se quedó bajo el cuidado de sus hijas está conmoviendo a internet.
La vida en la actualidad es una encrucijada en muchos sentidos. Las diferencias entre las clases sociales se han ido marcando cada vez más y los trabajadores se ven en situaciones más complicadas para vivir dignamente en este mundo. Por esto, los casos aislados y que sortean todos los augurios son dignos de celebrar. Así es el caso de Pablo Acuña, un hombre sin extremidades que sacó adelante a sus dos hijas.
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Pablo Acuña nació sin brazos ni piernas. Su movilidad se mantiene bastante limitada por lo que necesita moverse con ayuda de una carretilla.
Sin embargo, una de sus grandes odiseas fue sacar adelante a sus dos hijas. Actualmente con sus 62 años es un ejemplo para muchos padres que incluso no se hacen responsables económicamente, sentimentalmente y moralmente de sus hijos.
Hombre sin extremidades cría a sus hijas como papá soltero
Acuña conoció a la madre de sus hijas en su juventud. Ambos se enamoraron y mantuvieron su relación por un breve tiempo. Ya que ella decidió alejarse de sus hijas y de su pareja.
Ante esto, Pablo tuvo una difícil situación para criar a sus pequeñas como padre soltero, pero logró su propósito y hoy sus hijas están más que agradecidas.
La historia de este hombre se dio a conocer por la entrevista del diario paraguayo Crónica. Elida, hija de Acuña fue entrevistada y declaró que cuando ella tenía cuatro meses su madre los abandonó.
Y recuerda que su padre y abuela dieron todo para sacarlas adelante.
Elida ahora tiene 28 años de edad y su hermana mayor tiene 31 años. Ambas aseguran que jamás les hizo falta amor. Esto las ha convencido de devolverle los cuidados a su padre, especialmente Elida que declaró a Crónica:
“Mi papá es mi mundo. Es el mejor del mundo. Por eso dejé mi vida en Argentina para poder cuidarle”
¿Quién es Pablo Acuña?
Según sus hijas, Pablo vive prácticamente en su carretilla para poder desplazarse a todas partes. Incluso llega a dormir en este aparato.
Por otra parte, Elida mencionó que no sólo va a cuidar a su padre, que también estará a cargo de su abuela de 92 años, pues ella era cuidada por su padre.
Sin importar todas las adversidades que vivió Pablo Acuña, él jamás perdió el sentido del humor, así lo ha contado Elida por varias ocasiones y señala que su padre no necesita de un medicamento.
Finalmente, Elida cuenta que el deseo más grande de su padre es conseguir su propia casa:
“El deseo más anhelado de mi papá es tener su propia casa. Nosotros vivimos en alquiler, la dueña de la casa donde vivimos nos quiere vender, el precio es de 95 millones. Lo que nos faltan en este momento son 8 millones para hacerle realidad su sueño. Parece poco, pero es muchísimo dinero cuando uno no tiene. Además ahora yo ya no trabajo, él tiene un sueldo que cobra cada dos meses, pero solo sirve para comer”
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