La joven madre de tan solo 24 años murió meses después de dar a luz; los médicos le dijeron que su enfermedad no era motivo de preocupación.
Hollie Lowes era una joven madre de 24 años que murió debido a una serie de complicaciones relacionadas con un síndrome conocido como Wolff-Parkinson-White (WPW). Se trata de nada más y nada menos que de una condición cardíaca que provoca latidos anormales y rápidos.
De acuerdo con la información que circula en las redes, los médicos aseguraron a la familia de la paciente que los riesgos asociados con el padecimiento eran bajos. No obstante, menos de cinco meses después de dar a luz a su hijo, Hollie sufrió un paro cardíaco fatal.
Madre muere a consecuencia de una enfermedad mal diagnosticada
Hollie Lowes fue diagnosticada con WPW, una condición que hace que el corazón bombee muy rápido. Al momento de que los médicos le anunciaron su padecimiento, le dijeron que no era motivo de preocupación.
“Nos dijeron que no había riesgos relacionados con WPW y que Hollie podía continuar con su vida normal”, comentó su hermana menor, Sophie.
También les dijeron que en el peor de los casos la paciente podría desmayarse, pero nunca mencionaron la posibilidad de que sufriera un paro cardíaco. En Navidad de 2023, Hollie entró en trabajo de parto a las 27 semanas.
Debido a que el bebé fue prematuro, tanto ella como su esposo permanecieron junto al niño en el hospital hasta que cumpliera los nueve meses. A partir de ese momento la familia comenzó a disfrutar de la nueva etapa.
Sin embargo, meses después su rutina dio un giro inesperado. El 15 de mayo, Hollie sufrió un paro cardíaco inesperado en su hogar. Segundos después, se desplomó y dejó de respirar.
Tanto su madre como su esposo realizaron RCP y llamaron a emergencias. Mientras tanto, su padre llegó con un desfibrilador y le aplicó varias descargas antes de que llegara la ambulancia.
“Si hubiéramos sabido que eso habría estado en juego, habríamos presionado para que nos hicieran chequeos regulares, pero nos aseguraron que todo estaba bien”, dijo su hermana.
La joven madre fue trasladada de emergencia al hospital, donde permaneció durante nueve días. A pesar de los esfuerzos de los médicos Hollie falleció el 24 de mayo debido a un daño cerebral severo.
Finalmente, los médicos confirmaron que el paro cardíaco fue causado por WPW, la misma condición que inicialmente aseguraron no era motivo de preocupación.
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