El fisioterapeuta le habría solicitado a su paciente que se quitara la ropa frente a él para realizarle un extraño procedimiento.
Una joven denunció a través de sus historias de Instagram a Emmanuel G, un fisioterapeuta de Puebla que habría abusado de ella durante una consulta.
De acuerdo con su testimonio, una amiga le recomendó a este especialista, pues tenía mucho dolor en la pierna izquierda. La joven realizó una cita y acudió con su conocida a la clínica en un fraccionamiento de Angelópolis.
Cuando llegó a las instalaciones, el fisioterapeuta solo permitió que ella subiera con él para darle la terapia. Esta situación le generó desconfianza, pero pensó que era un protocolo por la pandemia.
“Comenzó a darme el masaje en la pierna y me dijo que mi lesión venía de la espalda: entonces me tronó la espalda. Pasó el tiempo y me dijo que la lesión venía de la espalda baja y que debía de hacerme un procedimiento para que quedara al cien. Ese procedimiento era o por el ano o por la vagina, a lo que yo rápidamente dije que no”.
El fisioterapeuta insistió en que debía hacerlo. Para darle confianza a su paciente, el especialista le dijo que su mamá podía ver, aunque sabía que, quien estaba abajo, no era su madre.
Joven narra abuso sexual de fisioterapeuta en Puebla
El fisioterapeuta cerró la puerta al instante y se puso unos guantes de látex. Según el testimonio de la víctima, este le pidió que se desnudara, pero jamás abandonó el consultorio.
La joven narra que se quitó la ropa con mucha incomodidad y realizó la postura para que el especialista hiciera su trabajo.
“Él comenzó a meter sus dedos en mi vagina para hacer el procedimiento. Ya habían pasado muchos minutos y para mí estaba siendo muy doloroso e incómodo. Por la posición que adopté, no podía ver lo que él estaba haciendo por atrás. Me llamo mucho la atención que para el masaje no tenía aceites, pero sí tenía vaselina”.
Cuando el hombre al fin terminó y la paciente quiso cambiarse, el fisioterapeuta nuevamente se quedó al interior del cuarto.
“Me fui del lugar y me comencé a sentir muy incómoda. Consulté con amigas y fisioterapeutas si ese procedimiento existía, pero todos me dijeron que no. Me empezó a hacer mucho ruido, y me aterraba la idea de saber que había sido violada por él”.
Al indagar más, la joven descubrió que el fisioterapeuta suele pedir a sus pacientes que se quiten la ropa para darles masaje. Tras percatarse de la gravedad del asunto, acudió a hacer la denuncia. Ahora está a la espera de que las autoridades hagan su parte. Sin embargo, pide que otras víctimas alcen la voz para que se haga justicia.
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Con información de Las Aparecidas
