Al parecer, la mujer perdió la vida tras recibir un duro golpe en la cabeza ejecutado con una mancuerna para hacer ejercicio.
Un nuevo feminicidio se escribió en Buenos Aires, Argentina. En esta ocasión, la mujer se llamaba María Alejandra Abbondanza. Tenía tan solo 38 años de vida y varias metas que planeaba cumplir en el futuro. Sin embargo, las cosas ya no serán como las había soñado.
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De acuerdo con medios internacionales, el 16 de septiembre la mujer sacó a pasear a su perro. Fue alrededor de las 17:30 horas cuando salió de su domicilio ubicado en Alberdi 700 y ya nunca más regresó.
Su hija, una adolescente de 15 años, se dio cuenta de que su mamá ya se había tardado mucho. Así que le avisó a sus familiares para que juntos comenzaran la búsqueda. La expareja de María Alejandra indicó que la mujer no se había ido muy lejos, pues no le gustaba caminar.
Durante la tarde noche, decenas de personas comenzaron a buscar a la mujer casa por casa. Tras la revisión de una cámara de seguridad, el escuadrón de búsqueda y rescate dio con su paradero.
Hallan a mujer sin vida en casa del vecino
Según los primeros informes, María Alejandra Abbondanza entró a la casa de un vecino con quien en el pasado tuvo una relación sentimental. Pero nunca se le vio salir del lugar, por lo que pidieron a las autoridades revisar la vivienda.
Aunado a esto, las cámaras de seguridad decretaron movimientos nocturnos de una persona saliendo de la propiedad. Al parecer un hombre salió a media noche a tirar una bolsa a la basura. En ese momento, el perro de María Alejandra escapó de la casa.
Horas más tarde, la policía de Argentina ubicó al presunto feminicida y detuvo a los padres del sospechoso. Pues se dice que varias personas estuvieron involucradas en el asesinato por tratar de esconder el cadáver. Además se informó que la mujer fue hallada quemada y descuartizada.
Las primeras indagatorias señalan que la mujer fue asesinada a golpes con una mancuerna de ejercicio. Después con ayuda de otras personas, el cuerpo de María fue descuartizado y quemado en una parrilla casera.
Finalmente, la familia del asesino intentó desprenderse de las evidencias tirando las prendas de la joven en otro lugar. Las fuentes judiciales explicaron que:
“El 90% del cuerpo estaba quemado, todavía no sabemos si lo descuartizó o si se desarmó producto del fuego”.
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