Sebastián Obando se encontraba en una heladería con su familia cuando una lluvia de balas desató el terror entre los presentes.
La muerte del menor identificado como Sebastián Obando, de 11 años, generó conmoción en Ecuador.
La Policía del país declaró que el niño se encontraba comprando un helado con sus padres y su hermana.
El menor falleció después de ser víctima de un tiroteo protagonizado por un presunto ladrón y un elemento de seguridad. Obando recibió al menos tres disparos y murió en el hospital del barrio de Guayaquil de Centenario.
En cámaras de seguridad se vio qué sucedió en la heladería, donde el menor y su familia elegían un sabor.
Momentos después, un sujeto armado ingresó al establecimiento, por lo que Tomás Obando levantó las manos para evitar el ataque.
Acto seguido, el ladrón comenzó a quitarle sus pertenencias a los clientes y fue ahí que un oficial entró en escena para encarar al presunto delincuente, hecho por el cual se desató una balacera.
A través del clip se observa que el malhechor le disparó en tres ocasiones al niño y huyó del establecimiento.
“Mi hija estaba detrás de mis piernas y mi hijo estaba en mi lado derecho. Logré tirar a mi hija al suelo, pero por miedo, mi hijo corrió hacia su madre; Traté de levantarlo y no pude alcanzarlo. Y cuando lo agarré por el pie y lo arrojé al suelo, las balas ya lo habían alcanzado”.
Familia de Sebastián acusa negligencia policial
Joselito Argüello, exfiscal de Guayaquil, afirmó que la familia culpó al elemento, quien no fue identificado.
La Policía Nacional explicó que el oficial activó el esquema de alerta antes de que los clientes se fueran. El acto ocasionó que quedaran atrapados entre el uniformado y el presunto delincuente.
“Debería haber esperado a que el ladrón robara y de ahí, salir a seguirlo y dispararle, pero no decir’ para, policía dentro del negocio. Se extralimitó”.
Joselito Argüello afirmó que ahora esperan a que la familia afectada presente su declaración sobre el caso.
Además, los elementos de seguridad se dieron a la tarea de indagar en el tema para deslindar responsabilidades.
En cuanto al cuerpo de Sebastián Obando, se mencionó que lo enviaron a la morgue para realizar la autopsia. Con la información obtenida se determinará si las balas que lo hirieron eran las del ladrón o del agente.
En caso de que lo consideren culpable, el uniformado recibiría cinco años en prisión bajo el cargo de homicidio.
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Con información de El Universo, Daily Mail y Ecuavisa
Portada: Especial
Fotos: Daily Mail