Liliana Carrillo asesinó a sus tres hijos para no tener que entregárselos a su padre, quien obtuvo la custodia tras una batalla legal.
Liliana Carrillo asesinó a sus tres hijos en California. Justificó su crimen señalando que no quería que su padre abusara de ellos.
El terrible suceso tuvo lugar en el barrio del Valle de San Fernando, en Reseda, el pasado 10 de abril. Ese día, la abuela de los pequeños descubrió la estremecedora escena.
Por ello, la mujer solicitó la intervención de las autoridades. Liliana Carrillo fue detenida en el condado de Kern tras el robo de auto mientras huía.
Durante una entrevista para medios locales, la madre reconoció el crimen. Sin embargo, aseguró que sus pequeños estaban siendo víctimas de abuso por parte de su padre.
El caso de la madre homicida
Liliana Carrillo comenzó a mostrar cambios en su conducta tras dar a luz a su primera hija, Joanna, en 2018.
Tras el nacimiento de su segundo hijo, Terry, en 2019, los síntomas se intensificaron. Sin embargo, en 2020, con la llegada de su tercera hija, Sierra, la situación se volvió insostenible.
Erik Denton, padre de los menores, renunció a su trabajo a finales de 2019 para cuidar a los niños. Esto, debido a que la conducta de Carrillo se volvió errática.
La mujer comenzó a tomar terapia, pero su condición se agravó y se negó a tomar medicamentos psiquiátricos. Además, empezó a consumir grandes dosis de marihuana.
Carillo y Denton vivieron juntos hasta el pasado 25 de febrero en Porterville. Posteriormente, la mujer se llevó a los pequeños a Reseda.
El 12 de marzo, Denton fue acusado de violencia doméstica y recibió una orden de restricción temporal. Se le prohibió acercarse a sus hijos y a la madre de estos.
Tras una larga disputa por la custodia, a Carrillo se le ordenó entregar a los niños a Denton el domingo 11 de abril. Un día antes, la mujer asesinó a los pequeños.
Familiares de la mujer declararon que ella no era una mala persona. Sin embargo, había perdido el contacto con la realidad en los últimos meses.
Liliana Carrillo confiesa el asesinato de sus hijos
Medios locales informaron que Liliana Carrillo apuñaló a sus hijos hasta la muerte. Sin embargo, en una entrevista ella confesó que los había ahogado:
“Los ahogué. Lo hice con la suavidad, no sé cómo explicarlo. Los abracé. Les di un beso. Me disculpé todo el tiempo. Amaba a mis hijos”
Asimismo, la madre justificó su crimen al señalar:
“No quería que siguieran abusando de ellos. Amaba a mis hijos. Ojalá no tuviera que ser así, pero prometí protegerlos”.
Anteriormente, la mujer ya había acusado a Denton de formar parte de una red de pedófilos. Asimismo, señaló que abusaba sexualmente de su hija de tres años.
Durante la batalla por la custodia, Carrillo alegó que otro de sus pequeños también mostraba signos de abuso. Dijo que intentó obtener ayuda y recurrió a la Policía, pero nadie la apoyó.
La mujer dijo que tras el crimen huyó de la escena en auto e intentó lanzarse a un acantilado para morir. Sin embargo, el auto se atascó y cuando un conductor se acercó a ayudarla le robó el auto.
Al ser cuestionada sobre si se arrepentía del crimen, Liliana Carrillo señaló:
“Ojalá mis hijos estuvieran vivos, sí. ¿Desearía no haber tenido que hacer eso? Pero prefiero que no sean torturados y abusados de forma regular por el resto de su vida”.
La mujer también dijo que ya aceptó la idea de que pasará el resto de su vida tras las rejas. Además, dijo que el último mensaje para sus hijos fue:
“Los amo. Y lo siento”.
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Con información de The Sun, KGet y CBS Los Angeles
Portada: Especial
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